En enero de 2020 Oneira club de viajeros organiza un viaje a Omán y Emiratos Árabes en grupo para  admirar algunas de las maravillas de la Península Arábiga ¿Nos acompañas?. Omán sigue teniendo el atractivo de ser un destino que empieza a abrirse  a los viajeros de todo el mundo y donde no encontraremos mucho turismo de masas. Conoce hoy una de las ciudades más hermosas de Omán. Hoy os hablamos de Nizwa en nuestro blog Oneira.

Nizwa, antigua capital del país, es un pequeño tesoro, conocida como la tacita de plata de Omán. un lugar encantador. Ubicada en un gran oasis con enormes palmeras, alrededor de las montañas más altas del país y en el punto neurálgico de las caravanas del sur y del norte, la ciudad siempre controló las rutas comerciales de la región. Fue Ibn Battuta, el mayor viajero de la Edad Media, el cual se recorrió desde el Sáhara hasta China y de Rusia hasta la India durante 30 años, quien describió el lugar como “una bonita ciudad bajo las montañas, cercada por enormes huertas y bellos bazares”.

El lugar dispone de una de las mezquitas más antiguas del mundo. Curiosamente y hace más de medio siglo, el explorador inglés Wilfred Thesiger fue forzado a pasar de largo por Nizwa, ya que sus compañeros beduinos le recomendaron ignorarla por su feroz conservadurismo, temiendo por su vida y evitando finalmente que entrara. Hoy se reiría de pensar que es la segunda ciudad más visitada del país. Otro nombre que recibe es el de la “Perla del islam” ya que desde la década de los 50 ha sido lugar de nacimiento de los imanes más agitadores por lo que actualmente sigue siendo una ciudad conservadora, aunque abierta a todos los viajeros que quieren conocerla.

Ya en la ciudad lo primero que se suele hacer, y más si se visita la ciudad un viernes (como así hemos programado expresamente), es dirigirse de buena mañana al Mercado de ganado de Nizwa. Esta es probablemente una de las experiencias más originales y únicas que pueden disfrutarse en Omán. El mercado comienza con la venta de ñus y vacas. Posteriormente continua con el comercio de ovejas y cabras, que es algo que los viajeros que vuelven de Omán cuentan como maravillosamente divertido. El aire está envuelto en un penetrante olor a cabra mientras que los vendedores organizan circuitos exhibiendo a su ganado. Los compradores se amontonan, examinando detalladamente (sí, detalladamente) a cada uno de los animales para elegir correctamente, interesándose por ellas, preguntando por su valor y obteniendo la máxima información del animal. La mayoría de los participantes son hombres, aunque algunas mujeres de pueblos lejanos también interaccionan. Nos sorprenderán los atavíos de algunas mujeres y hombres, sus máscaras en algún caso; la vida latiendo en este remoto lugar del Medio Oriente.

Muy cerca del mercado se encuentra el Fuerte de Nizwa, levantado en el siglo XVII por el Sultán Saif al-Yaruba, el primero de la dinastía Ya’aruba. Es el más grande y antiguo del país y tenía la importantísima misión de defender este estratégico y extraordinario cruce de caminos. De hecho, hubo un tiempo que Nizwa fue la plaza más disputada entre las contendientes tribus, antes de que Omán se convirtiera en un sultanato. Es una construcción magnífica, especialmente la enorme torre que mide más de 30 metros de diámetro y 40 metros de altura. Desde arriba se puede observar el Oasis de Nizwa al completo, donde crecen hasta 40 variedades diferentes de dátiles y también hay una bonita perspectiva de la cordillera de Hajar. El fuerte posee unas dimensiones enormes, con colores ocres y líneas virtuosas. El Zoco de Nizwa, el cual ha conseguido permanecer durante cientos de años, está repleto de puestos de todo tipo y posee un aspecto moderno pero con una arquitectura que intenta recordar el pasado. Aquí podremos encontrar también dagas omaníes (khanjar) – similares a las yemenitas- cobre, joyería de plata, ganado, pescados, verduras y todo tipo de artesanías. Nizwa es eso, una ciudad tradicional de las que ya no quedan, que probablemente y con toda seguridad, nos dejará con la boca abierta... caeremos rendidos por su poder evocador de historias y leyendas de esta parte del mundo.

Alberto Bermejo y Daniel Bermejo

ONEIRA club de viajeros

www.oneira.es

info@oneira.es