La Bahía de Halong cuenta con una superficie de más de 1500 km2 de agua. Este maravilloso lugar es uno de los parajes naturales más sobrecogedores del planeta. Embarcarse, surcar y soñar en uno de los barcos tradicionales (junco) de velas rojas que navegan por estas aguas y disfrutar de sus fantásticas formaciones rocosas es una actividad que no puedes obviar en tu aventura por Vietnam.
La Bahía de Halong es un lugar repleto de leyendas e historias, ubicado en un entorno natural único, por su belleza y majestuosidad. Lo encontramos en el golfo de Tonkín y recorre 120 kilómetros de costa asiática, repletos de más de 2000 islas e islotes de roca kárstica recubiertas de exuberante vegetación con multitud de formas y tamaños que emergen de sus aguas verde esmeralda, ocultando cuevas y lagos interiores. Estas extrañas y espectaculares formaciones rocosas sobresalen del mar y crean un mundo que permanece ajeno al paso del tiempo, creando un escenario de gran belleza. Las velas de los juncos y de los sampanes que se deslizan por la bahía acentúan la experiencia de estar viviendo un momento sublime y especial en este marco incomparable. El nombre de Halong significa “donde el dragón desciende al mar”. Las velas de los sampanes y juncos tradicionales que se deslizan por las verdes aguas de Halong resaltan la inigualable experiencia de estar disfrutando un momento que nunca olvidaréis en este conmovedor entorno onírico. De hecho, el lugar es de tal importancia que en 1994 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, también es considerado como una de las 7 Maravillas Naturales del Mundo desde el año 2011.
Cuenta la tradición local que cuando los vietnamitas se enfrentaban a los chinos que intentaban invadirlos, los dioses mandaron a una familia de dragones para asistir a los lugareños en la defensa de sus tierras. Estos dragones comenzaron a escupir joyas y jade que terminaron transformándose en islas e islotes que se esparcieron a lo largo de la Bahía de Halong, uniéndose para constituir una enorme muralla contra los usurpadores. Muchos de los locales aún creen que el dragón se localiza debajo de sus aguas, ¡quizás te lo encuentres paseando por la borda! . Todas las cuevas conocidas poseen su propia leyenda, incluso los modestos escollos de piedra caliza reciben caprichosos nombres por parte de los pescadores. Son nombres como el Perro o la Tortuga o el Sapo, otorgados por el extraordinario parecido de la roca con las formas de estos animales.
La zona está formada por 3 bahías: Lan Ha, Halong y Bai Tu Long. La bahía de Lan Ha que se encuentra al sur de la isla de Cat Ba. A la derecha de esta se encuentra la bahía de Halong y la más lejana de todas es la de Bai Tu Long. Algunas excursiones que los viajeros suelen realizar en función del número de días que se quedan en la Bahía son actividades en kayaks, la visita de la cueva de Sung Sot o cueva del Aturdimiento donde abundan grutas y estalactitas y donde se encuentra la famosa roca con forma fálica, símbolo de fertilidad, la visita a Hang Thien Cung o gruta del Palacio Celestial, excursiones tipo trekking, taichí al amanecer en la cubierta del barco y la visita de alguno de las aldeas flotantes de pescadores (especialmente cuando la estancia supera las 2 noches). En los alrededores se pueden encontrar lagos y playas soliitarias. Muchas de las islas tienen una fauna diversa con pájaros, gallos, antílopes, monos y lagartos. Algunas de las cuevas están cubiertas de agua y se accede en canoa o piragua, otras se encuentran a nivel del mar, o sobre él, lo que obliga en algún caso a subir algunos escalones. Dentro de las cuevas más importantes se abre un mundo diferente, lleno de estalagmitas y estalactitas de piedra caliza, acompañadas de miles de rocas con increíbles formas, originadas de forma natural y con apariencia de distintos animales. Algunas cuevas tienen grutas secretas y cavidades sorprendentes. Cuando llega la primavera (precisamente, coincidiendo con la fecha de viaje de Oneira 2019) los bosques de palmeras datileras y albaricoqueros que rodean la bahía muestran sus flores, creando un paisaje romántico en Ha Long.
En algunos momentos, en Ha Long podemos observar un tenue velo de niebla. Remar en un bote en la niebla hace que nos lleguemos a sentir flotando entre nubes. ¿No os parece Ha Long un lugar mágico?
Alberto Bermejo
Daniel Bermejo
ONEIRA club de viajeros
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